jueves, 17 de noviembre de 2011

Las ranitas y la nata.


Antes de que empecéis a leer lo que es la entrada en si, quiero que sepáis que no es de mi cosecha si no de otro autor conocido, alguno lo conoceréis otros no, algunos lo habréis leído otros no. Pero lo que si que me parece importante es que la leáis, porque realmente os hará reflexionar. Ahí va:
Había una vez dos ranas que cayeron en un recipiente de nata. Inmediatamente se dieron cuenta de que se hundían: era imposible nadar o flotar demasiado tiempo en esa masa espesa como arenas movedizas. Al principio, las dos ranas patalearon en la nata para llegar al borde del recipiente. Pero era inútil; sólo conseguían chapotear en el mismo lugar y hundirse. Sentían que cada vez era más difícil salir a la superficie y respirar. Una de ellas dijo en voz alta: "No puedo más. Es imposible salir de aquí. En esta materia no se pude nadar. Ya sé que voy a morir, no veo por qué prolongar este sufrimiento. No entiendo que sentido tiene morir agotada por un esfuerzo estéril". Dicho esto, dejó de patalear y se hundió con rapidez, siendo literalmente tragada por el espeso líquido blanco. La otra rana, más persistente, o quizás más tozuda, se dijo: "¡No hay manera! Nada se puede hacer para avanzar en esta cosa. Sin embargo aunque se acerque la muerte, prefiero luchar hasta mi último aliento. No quiero morir ni un segundo antes de que llegue mi hora". Siguió pataleando y chapoteando siempre en el mismo lugar, sin avanzar ni un solo centímetro , durante horas y horas. Y, de pronto, de tanto patalear y batir las ancas, agitar y patalear, la nata se convirtió en mantequilla. Sorprendida, la rana dio un salto y, patinando llego hasta el borde del recipiente. Desde allí, pudo volver croando alegremente.
Moraleja: No dejéis nunca de luchar al final siempre hay una salida para todo.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

2 de noviembre de 2011

Hoy 2 de noviembre de 2011, escribo mi entrada número 400,hace tiempo que dejé el copia y pega de antes y quería que la número 400 fuera especial, así que he decidido que fuera hoy, porque es el día en el que mi nene cumple 11 años y nadie se merece una entrada especial como él (quitando a mis padres como es obvio). Cuando digo nene me refiero a mi perro, si a mi perro estás leyendo bien. Mucha gente dirá que estoy loca o algo parecido pero, no es así, aquel que tiene o a tenido la oportunidad de querer a un animal sabe de lo que hablo. 
Normalmente me quedo embobada mirándolo y siempre me hago la misma pregunta: ¿Cómo algo tan pequeño e indefenso te lo puede dar todo sin pedir nada a cambio? La repuesta se resume en una palabra... FIDELIDAD, porque por mucho que tu les hagas ellos siempre van a estar ahí, siempre. Porque te quieren sin condiciones.
¿Qué pensáis del "querer sin condiciones"? Yo pienso que es lo más bonito del mundo, muchas personas deberían de aprender de los animales, todo iría mucho mejor.
Y para finalizar decir que yo estoy orgullosa de mi animal, de mi perro, de mi nene, de mi felicidad. Ojalá alguna vez quiera a alguien como lo quiero a él.